Memorias encontradas en una bañera es uno de los libros más enigmáticos de Lem. En apariencia es una sátira divertida del mundo de agentes secretos a día de hoy, lleno de traición y deslealtad, mientras que en realidad es un texto cifrado, como todos los textos en el mundo de espías. Un lector atento descubrirá una crítica del estado totalitario, pero también una parábola sobre la condición del hombre perdido en el cosmos de señales fabricadas por la sociedad, la cultura, la literatura, el mundo físico y la biología. De esta forma lo grotesco y la burla se convierten imperceptiblemente en filosofía.

Este libro abarca un concepto que sobrepasa lo inmediato de una sátira política. Aquí nos encontramos con la totalización de la noción de intencionalidad. Este procedimiento se ha llevado a cabo con una consecuencia inalterable, a veces hasta fantasmagórica, lo que dio unos efectos sorprendentes. A mí me parece que es una cosa original y auténtica, ya que el ser humano es capaz de considerar todo lo que se encuentra en su campo de percepción como comunicado.